Prof. Dra. Patricia Arca Mena
y Lic. Gustavo Masutti Llach
Misterio, maravilla, desafío. El cerebro humano es apenas un amasijo de células que puede ser sostenido en la palma de la mano. Pero que desde su modestia, tiene la desfachatez de querer abarcar la inmensidad del espacio infinito, de tratar de desentrañar la complejidad de lo que lo rodea y de cuestionar hasta el sentido de su propia existencia.
Las neurociencias se ocupan de él, tratan de entenderlo y
explicarlo. Porque al hacerlo, se interpreta la realidad de otra manera. Esa
que vemos, tocamos, olemos o recordamos, pero que no es más que la
decodificación que el cerebro hace de estímulos que le llegan desde “el
exterior”.
Como toda disciplina nueva, hasta que defina sus límites y
consiga acomodarse a una identidad, la neurociencia deberá seguir explorando
sus fines y sus fronteras. En principio, es una ciencia que investiga la
estructura, la función biológica, química, farmacología, y patología del
sistema nervioso y de cómo los diferentes elementos del sistema nervioso
interaccionan y dan origen a la conducta.