jueves, 15 de noviembre de 2012

La angustia material y la insustancialidad de la postmodernidad

Texto e instalación de Nancy Pavic

Comunicación y Significados


La “mano invisible”, la fuerza que nos lleva a aceptar como verdades incuestionables los mandatos de lo que se usa y de lo que no se usa; lo que se debe guardar y lo que se debe tirar; cómo se debe crear y que se debe destruir. Esa “mano”, la moda, es un fenómeno del mundo occidental que aglutina y nos masifica con la promesa de la distinción, de alcanzar el glamour de las clases dominantes  y nos hace aceptables para el grupo social con el cual interactuamos.


viernes, 19 de octubre de 2012

La estructura de la experiencia religiosa

Sergio Fuster

Podríamos decir que la experiencia religiosa no es proveniente ni del sujeto ni del objeto, es inobjetivable. Pero como toda vivencia humana tiende a ser comunicada, socializada, por lo tanto se expresa en una forma de lenguaje que tiene su propia morfología. El estudio de la articulación de este lenguaje va a permitir desestructurar dicha experiencia de tal manera que sea legible para el campo del análisis, que es en este caso de tipo fenomenológico.
La vivencia humana con relación a lo numinoso, es disparada cuando “lo otro” irrumpe en su vida y hace una incisión en sus fundamentos ontológicos, creando de este modo, una experiencia que se vive en el fondo entitativo pero que pertenece a otro orden de realidad.  La misma se experimenta en el ser en cuanto ser (Dasein como diría Heidegger) y luego es proyectiva (más allá de) por su misma naturaleza, es el religare que ya había notado Zubiri. Es decir, primero se intuye interiormente, este será el campo de estudio de la psicología, luego se “muestra” o produce un fenómeno, o sea una manifestación externa  inserta en el tiempo y en el espacio, este será el objeto de estudio de la historia y de la sociología como ciencias positivas y de la fenomenología como método.

martes, 15 de mayo de 2012

La actitud del científico ante la Trascendencia

Gustavo Masutti Llach

El 23 de febrero de 2012 la Universidad de Oxford armó una charla – debate entre el biólogo evolutivo Richard Dawkins, uno de los ateos militantes más conocidos, y el arzobispo anglicano de Canterbury, Rowan Williams. El moderador del encuentro fue el filósofo y agnóstico declarado Anthony Kenny. Se trató de una reedición del famoso debate de 1860 entre Henry Huxley (abuelo de Aldous) y el entonces obispo de Oxford, Samuel Wilberforce, a siete meses de la edición de “El origen de las especies” de Charles Darwin.

Si bien esta nueva edición fue menos agresiva que aquella, la esencia fue la misma. Se trata de poner de un lado a la ciencia y del otro a la religión. En este caso, en “el rincón rojo” estaba Dawkins, en el azul Williams y el árbitro sería Kenny. Nunca hubo en todo el debate la mínima chance de una síntesis superadora. Como es lógico, no se llegó a ninguna conclusión y, presumiblemente, cada bando se fue con las mismas ideas que traía.

La discusión entre ciencia y Fe se hace interminable, sobre todo porque todavía parecen predominar posturas irreconciliables de ambos lados de la trinchera. En muchos casos, las visiones enfrentadas toman tal nivel de polémica que una le niega validez a la otra, casi sin tenerla en cuenta. Desde luego, siempre habrá militantes de una y otra visión del mundo que se sientan a gusto con esta pelea. Sin embargo, existe una gran “escala de grises” entre estas dos posturas extremas. Hay científicos que llevan una vida espiritual intensa, y religiosos que hasta van modificando su discurso y creencias en sincronía con los descubrimientos de la ciencia.

viernes, 11 de mayo de 2012

Article Quantification of Electron Transfer Rates to a Solid Phase Electron Acceptor through the Stages of Biofilm Formation from Single Cells to Multicellular Communities


Cuantificación de la tasa de transferencia de electrones a un aceptor de electrones de fase sólida a través de las etapas de formación del biofilm de las células individuales de las comunidades multicelulares



Jeffrey S. McLean*, Greg Wanger, Yuri A. Gorby, Martin Wainstein, Jeff McQuaid, Shun’ ichi Ishii, Orianna Bretschger, Haluk Beyenal and Kenneth H. Nealson§
The J. Craig Venter Institute, San Diego, CA, The Gene and Linda Voiland, School of Chemical Engineering and Bioengineering and Center for Environmental, Sediment and Aquatic Research, Washington State University, Pullman, WA, and University of Southern California, Los Angeles, CA
Environ. Sci. Technol.201044 (7), pp 2721–2727
DOI: 10.1021/es903043p
Publication Date (Web): March 3, 2010
Copyright © 2010 American Chemical Society




Abstract
Microbial fuel cell (MFC) technology has enabled new insights into the mechanisms of electron transfer from dissimilatory metal reducing bacteria to a solid phase electron acceptor. Using solid electrodes as electron acceptors enables quantitative real-time measurements of electron transfer rates to these surfaces. We describe here an optically accessible, dual anode, continuous flow MFC that enables real-time microscopic imaging of anode populations as they develop from single attached cells to a mature biofilms. We used this system to characterize how differences in external resistance affect cellular electron transfer rates on a per cell basis and overall biofilm development in Shewanella oneidensisstrain MR-1. When a low external resistance (100 Ω) was used, estimates of current per cell reached a maximum of 204 fA/cell (1.3 × 106 e− cell−1 sec−1), while when a higher (1 MΩ) resistance was used, only 75 fA/cell (0.4 × 106 e− cell−1 sec−1) was produced. The 1 MΩ anode biomass consistently developed into a mature thick biofilm with tower morphology (>50 μm thick), whereas only a thin biofilm (<5 μm thick) was observed on the 100 Ω anode. These data suggest a link between the ability of a surface to accept electrons and biofilm structure development.